I. “Lo que es afirmado sin prueba, puede ser denegado sin prueba…”: por eso lo que te dices por las noches, lo que tu corazón desea desde el fondo de su masa orbitante, no requiere de pruebas fehacientes, ni datos estadísticos, sólo la voluntad de conseguirlo. Decides por ti mismo quien eres, y eres lo [...]
Debe estar conectado para enviar un comentario.